Nike Air Zoom Pegasus 39

Para un ojo poco avispado como el de su humilde servidor, la nueva Nike Air Zoom Pegasus 39 puede pasar perfectamente como un nuevo color de la edición anterior, si bien hay que aclarar que hay tantos colores y ediciones con cada versión que tampoco es una locura confundirlas. Además, varios de los cambios más significativos como una amortiguación un pelín más blanda o la adición de la almohadilla Zoom Air en la parte trasera no son visibles desde el exterior. Lo que sin duda será bien visible es el inevitable aumento de precio con cada renovación, un clásico que se repite cada año para una zapatilla que es un mito para el corredor popular.

Después de mirarlas con detenimiento, está claro que el corte superior parece más trabajado que en su antecesora Air Zoom Pegasus 38 con un tejido con diferentes densidades dependiendo de la zona, un refuerzo un tanto intrusivo desde donde salen los ojales en los que teminan los cables FlyWire si bien mantiene un Swoosh sobredimensionado y sin relleno en la parte exterior. Parece que será más traspirable con abundantes zonas de ventilación si bien ha de ser el usuario final quien dé su veredicto.

El resto de la Air Zoom Pegasus 39 cambia ligeramente de manera que los incondicionales de la saga puedan identificarla con modelos de años anteriores. La mediosuela sigue siendo completamente de React si bien en esta edición presenta una sensación un poco más blandita. La otra novedad de la mediosuela es la vuelta de la almohadilla de Zoom Air en la parte trasera aunque sabiendo cómo se las gasta la marca de Oregón la quitarán en un tiempo para así volver al ponerlas tiempo después. Por último, la suela también recibe su actualización con un pequeño rediseño del taqueado y una segunda estría de flexión que mejora la flexibilidad y contribuye a una transición más ágil. Ale, a correr.